martes, 13 de junio de 2023

¿Qué reforma necesita el Consejo de Seguridad de la ONU?

En la actualidad la ONU no está funcionando al cien por ciento de sus capacidades y necesita reformas serias. Sin embargo, no se puede permitir que esta organización se convierta en una estructura obediente del llamado “Occidente colectivo”


   Foto: ONU

Caracas, 13 de junio de 2023.- En la actualidad y en todos los panoramas, los miembros de la Organización de Naciones Unidas (ONU) están de acuerdo en que la necesidad de reformar el Consejo de Seguridad de esta estructura está atrasada. Algunos grupos aislados de países ("Grupo de los Cuatro”, "Unidos por el Consenso" y la Unión Africana) presentaron su visión sobre el futuro del Consejo de Seguridad, pero ninguno ha podido presentar aún la versión de la reforma que convendría a la mayoría de los países miembros de la organización. 

Las principales razones de la necesidad de reformar esta organización de naciones unidas fueron: la necesidad de fortalecer la autoridad de la ONU a los ojos de la comunidad internacional, aumentar el nivel de legitimidad de la organización y garantizar una mayor representación en su órgano principal: el Consejo de Seguridad, así como la necesidad de adaptar la ONU y todas sus estructuras e instituciones a las realidades del mundo moderno.

¿Qué le ocurre a la ONU?

Escenarios transformados.

En efecto, desde la creación de la ONU, las realidades mundiales han cambiado drásticamente durante los 78 años de existencia de la organización. Si en 1945 sus miembros eran 50 estados, ahora su número es de 193, se han formado nuevas alianzas y bloques, surgieron nuevos centros de política y economía. Las antiguas colonias británicas se han convertido en unos de los líderes mundiales. Exigen que sus opiniones sean tenidas en cuenta sobre diversos temas de la política mundial.

Problemas de financiación.

El problema para la ONU es el tema de la formación de su presupuesto y las contribuciones desiguales de los países miembros de la organización.

La contribución de cada estado se calcula de acuerdo con la fórmula aprobada por la Asamblea General, que tiene en cuenta el nivel de ingreso per cápita promedio del PIB. La distribución desigual de la carga financiera genera desacuerdos entre los países miembros de la ONU, lo que afecta negativamente sus actividades. Algunos países desarrollados creen que el monto de las contribuciones a la ONU debe estar correlacionado con el papel que juega el país en el órgano clave de la organización.

El problema de la burocracia es uno de los problemas más graves que obstaculizan el trabajo de la ONU. Algunas de las reglas y procedimientos propios de ella, son en sí mismos el mejor medio para impedir el funcionamiento exitoso de la organización.

Contradicciones.

Alemania, Japón, India y Brasil (Grupo de los Cuatro) están en una coalición para ampliar el número de miembros permanentes. Por regla general, a la posición de cada uno de estos países se oponen otros líderes regionales: Pakistán (contra India), Italia y España (contra Alemania), México, Colombia y Argentina (contra Brasil), Corea del Sur (contra Japón) se oponen a la propuesta de ampliación de miembros permanentes. Estos estados también formaron un grupo de coalición de 12 estados (Unidos por el Consenso) que abogan por un aumento de los miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de 10 a 20. Arabia Saudita también expresa sus reclamos al representante de los musulmanes como miembro permanente del Consejo de Seguridad. 

El tema clave de las reformas en la ONU es la reforma del Consejo de Seguridad.

Las propuestas de los países sobre la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU se pueden agrupar en tres grupos: 1) reformas de procedimientos, como regla, restricción del llamado "derecho de veto"; 2) aumento en el número de miembros permanentes y no permanentes; 3) estandarización de criterios de elección (lo promueve activamente Estados Unidos: contribuciones a la ONU, participación en operaciones de mantenimiento de la paz, economía, territorio, o incluso el hecho mismo de que el estado aún no haya sido elegido para el Consejo de Seguridad).

¿Cómo debe ser la organización?

La opción de EEUU y sus aliados es ampliar la composición del Consejo de Seguridad para incluir a sus aliados más cercanos y darle el poder de anular el veto de los miembros permanentes entre sus oponentes Rusia y China. Y, por supuesto, otorgando mayores derechos a los que más hacen contribuciones a la organización.

China y Rusia están proponiendo cambios que traerían diversidad global dentro de la organización. La ONU y su Consejo de Seguridad deberían reflejar en mayor medida la diversidad de las regiones del mundo, porque de Asia, África y América Latina en el mundo del mañana dependerá mucho más de lo que se cree hoy, y tal aumento de su influencia es ciertamente positivo.

Una situación en la que la mitad está compuesta por países occidentales, por supuesto, no es buena. Los países en desarrollo, en particular los estados de Asia, África y América Latina, deberían estar fuertemente representados en el Consejo de Seguridad. Este Consejo debe ser más representativo, pero al mismo tiempo, el órgano no debe perder su eficiencia y eficacia. La mejor opción sería que el Consejo de Seguridad incluyera unos 20 países.

Resumiendo todo lo anterior, cabe señalar que en la actualidad la ONU no está funcionando al cien por ciento de sus capacidades y necesita reformas serias. Sin embargo, no se puede permitir que esta organización se convierta en una estructura obediente del llamado “Occidente colectivo” para realizar sus intereses y contrarrestar a sus oponentes, debe transformarse en un organismo eficaz para resolver problemas globales y regionales respetando las opiniones, tradiciones nacionales y forma de vida de todos los participantes en la comunidad internacional.

WBD/Prensa.-